El Ayuntamiento
de Madrid ha aprobado hoy
una moción por la que se compromete a tomar medidas para reducir la exposición
de su población y medio ambiente a los disruptores endocrinos presentes en sus
servicios municipales.
El Grupo Municipal Ahora Madrid conjuntamente con el Grupo Socialista y Ciudadanos ha presentado, a instancias de Ecologistas en Acción y Fundación Alborada, una moción que ha sido aprobada gracias a los votos a favor de estas tres formaciones políticas y con la abstención del Partido Popular. Los concejales Javier Barbero (Ahora Madrid), Nacho Benito (PSOE) y Ana Dominguez (Ciudadanos) han defendido en el pleno la necesidad de adoptar las medidas de esta propuesta para evitar las consecuencias de los disruptores endocrinos en la salud humana.
Los disruptores
endocrinos, también llamados contaminantes hormonales o EDC, son sustancias
sintéticas capaces de alterar el correcto funcionamiento del sistema hormonal.
Esta alteración se relaciona con el incremento de importantes daños a la salud
como problemas reproductivos (ej., infertilidad, malformaciones congénitas),
tumores en órganos hormono-dependientes (mama, próstata, testículo, tiroides),
enfermedades metabólicas (diabetes, obesidad), enfermedades inmunológicas y
alteraciones en el desarrollo del sistema neurológico, entre otras, según
advierte un estudio de la Organización Mundial para la Salud (OMS).
“Cada día observamos un mayor número de pacientes con este tipo de enfermedades. Los disruptores endocrinos ya son un problema de salud pública que debe ser abordado desde la responsabilidad: las autoridades tienen en sus manos las vidas de cientos de miles de personas. Desde la consulta los médicos podemos informar al paciente, aconsejarle sobre qué productos o qué hábitos debe evitar, pero si la exposición a estas sustancias se produce en un parque, en un colegio o en un comedor público, el ciudadano está indefenso.” Son palabras de Pilar Muñoz-Calero, Presidenta de la Fundación Alborada y Codirectora de la Cátedra Patología y Medio Ambiente de la Universidad Complutense de Madrid.
Mediante esta moción el Ayuntamiento de Madrid se compromete desarrollar las
siguientes medidas concretas para la reducción de estos tóxicos:
1. Limitar el uso de plaguicidas susceptibles de
actuar como disruptores endocrinos (entre ellos, el glifosato) en parques y jardines,
centros escolares y cualquier edificio de titularidad municipal pública.
2. Limitar el uso de disruptores endocrinos en los
contratos y compras públicas.
3. Reducir la exposición a disruptores endocrinos
a través de la alimentación mediante al fomento de alimentos ecológicos, el uso
de envases alimentarios sin tóxicos (como el Bisfenol A o los ftalatos) y
buenas prácticas en los comedores colectivos de titularidad pública.
4. Informar a la población sobre los riesgos de
los disruptores endocrinos, sus fuentes de exposición y consejos de reducción a
través de acciones de formación y sensibilización.
5. Instar a la Comunidad de Madrid y a los
Ministerios de Sanidad, Servicios Sociales e lgualdad y al Ministerio de
Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente a la adopción de políticas para
reducir la exposición de la población y para conseguir la prohibición de estas
sustancias.
6. Informar anualmente al Pleno del Ayuntamiento
y a la ciudadanía a través de su página web de los avances en el cumplimiento
de este acuerdo.
Con la aprobación
de esta moción, Madrid se une a las otras 9 localidades y 3 Comunidades
Autónomas españolas que se han comprometido con la reducción de la exposición
de su población a los contaminantes hormonales, algo fundamental teniendo en
cuenta la escasa voluntad política para regular adecuadamente estos tóxicos desde
Europa.
La Fundación
Alborada agradece la implicación del Ayuntamiento de Madrid adoptando medidas
de prevención con las que se desea evitar el grave perjuicio para las personas
que sufren enfermedades relacionadas con la disrupción endocrina. Según Ruth
Echeverría, responsable del proyecto “¡Que no te alteren las hormonas!” de la
Fundación Alborada: “Dando este paso a favor de la salud de los vecinos de
Madrid, este Ayuntamiento se erige como un ejemplo a seguir no sólo en España,
sino en toda la Unión Europea. Las acciones a nivel local a menudo son más
efectivas y su impacto puede multiplicarse. Estamos seguros de que muchos otros
Ayuntamientos seguirán la estela de Madrid uniéndose a la red de municipios
libres de disruptores endocrinos.”
La web de la
campaña “Mi ciudad cuida mis hormonas” de la Fundación Alborada recoge un mapa
con los municipios que han aprobado mociones para reducir la exposición
ciudadana a disruptores endocrinos. Madrid, Zaragoza, Onda, Alcalá de Guadaíra,
Anglés, Estella-Lizarra… son algunos de los ayuntamientos españoles que ya
trabajan para proteger el medio ambiente y la salud de sus habitantes.
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